Análisis de Blue Dragon: Awakened Shadow – Nintendo DS

Blue Dragon Blue Dragon Awakened Shadow Nintendo DS




¡Joven aventurero! Despiertas pálido, sin recuerdos a los que recurrir, y vacío de alma y corazón. Sigues la senda de la esperanza, la luz del sol y la ardiente brisa que cabalga por las pequeñas fisuras de la roca. En la superficie, una ciudad reina en el horizonte, el bullicio te atrae y te diriges sin saber por qué al primer eslabón de tu memoria.
Allí, todos te miran perplejos, eres el único humano con sombra. Todos te creen un ancestro, el salvador de sus penurias, el héroe que llevaban esperando, pero joven héroe, sigues perdido, porque aunque todos te adoran, no te quieres a ti mismo.

EL DESPERTAR DE UN CLÁSICO

Contar con un elenco de genios desarrollando un videojuego es sinónimo de mucha calidad. El Blue Dragon original, aparecido en Xbox 360, nos maravilló con un equipo compuesto por el creador de Final Fatasy y el dibujante de Dragon Ball. A pesar de no ser un éxito en ventas, el equipo de Mistwalker ha hecho de su Blue Dragon una franquicia, quizás un inicio de una saga que, con el tiempo, pueda incluso codearse con esas grandes producciones que quizás vaguen ancladas en la poca originalidad.
Aunque haya pasado muy desapercibido, Nintendo DS ya contó con otra versión de Blue Dragon hace escasamente un año, una primera piedra que fue bastante pasada por alto y extrañamente incomprendida por el mercado. Sin embargo, con este Blue Dragón: Awakened Shadow las cosas han cambiado. En esta ocasión la salida está sonando más fuerte y las campañas de marketing del juego, sobre todo en Japón, han funcionado mucho mejor. Por otra parte, el equipo vuelve a nutrirse de grandes colaboradores, como los desarrolladores de la serie Tales of y el equipo de Tri-Crescendo (Eternal Sonata).

HISTORIAS PERSONALIZADAS

Estas colaboraciones han tenido un gran peso en el juego, porque ahora contaremos con combates en tiempo real en lugar de los propios en turnos con los que nació la IP. Otra de las novedades que entra a primera vista es la apuesta por un protagonista personalizado en la aventura. Aquí dejaremos a Shu y Zola ser personajes de apoyo y la historia y peso argumental recaerá sobre nosotros mismos.

El juego nos ofrece la posibilidad de personalizar a nuestro personaje con unos niveles bastante notables. Podemos elegir el sexo, el tipo de ojos, la boca, las cejas, el color y el pelo. Además, esta personalización va mucho más lejos ya que, en el transcurso del juego, podremos cambiar el equipo del personaje, afectando a su apariencia exterior.
El título tiene un aura bien marcada de juego de 16 bits pero en 3D. Esto no solo se ve en el diseño de personajes y escenarios, sino también en el desarrollo del propio juego y en la interfaz. Esto puede ser leído desde una perspectiva positiva y negativa, aunque a nuestro entender se rescata un estilo que hacía tiempo no se explotaba, y en parte homenajea a la edad de oro de los videojuegos y del género.

SUAVE NARRATIVA Y MADUREZ DEL GÉNERO

En todo caso la trama en Blue Dragon: Awakened Shadow no es su punto destacado. No es una trama que enganche, y parece que va a un ritmo bastante lento y anodino. El argumento sucede dos años después del juego original de Xbox 360 y uno después de la anterior entrega de Nintendo DS. Se nos sitúa en la piel de un personaje creado desde cero que se despierta en un laboratorio ancestral bajo tierra, y en la superficie conoce a Shu y Zola -viejos conocidos- que viven en el Neo Yibral. Los acontecimientos aparecen muy atropellados, -casi como un argumento para lo más pequeños-, y podría acarrear que los jugadores más experimentados exijan mucho más en este nivel.
A pesar de este contratiempo, hay un alto grado de madurez en el concepto RPG incluido en el juego. Tenemos multitud de opciones en la distinta interfaz, con unas subidas de nivel bien complementadas, combinación de objetos y un gran abanico de misiones principales y secundarias que podemos tomar en un orden medianamente abierto.
El control es sumamente flexible, pudiendo elegir el control clásico usando la cruceta direccional y los pertinentes botones; o bien el control inherente de la portátil de Nintendo con el stylus en su máxima expresión. Así nos moveremos en la pantalla con un simple golpecito del lápiz, teniendo que hacer lo mismo hacia el enemigo para atacarlo. A la hora de rotar la cámara debemos buscar las esquinas, aunque en esta ocasión se nos hace mucho más fácil usar los botones superiores para girar la cámara, que no es del todo libre y viene predefinida por una serie de ángulos.

Como dijimos, el sistema de combate pasa a ser en tiempo real, lo que nos ha parecido un gran acierto por ser juego de portátil. Los personajes se comportan fenomenalmente, responde bien a nuestras acciones y el uso de los objetos y las magias no da ningún problema. Además, la posibilidad de usar las sombras con una simple recarga del botón de ataque, da un enfoque dinámico y fresco a los combates.
Los personajes de apoyo, a los que podremos equipar a nuestro antojo con las sombras que consideremos oportunas, hacen un buen trabajo en equipo -quizás muy precipitados en algunos momentos- pero de gran ayuda en los combates más complicados. Habrá hasta seis sombras en total, cada una de ellas es afín a alguno de los elementos y cada personaje funcionará mejor sobre el terreno teniendo la más adecuada a su lado.
El juego cuenta con un multijugador local y online donde podremos reunirnos con otros dos jugadores para vencer a aquellos enemigos más complicados. Esta idea bebe directamente de la vista en Monster Hunter, porque de hecho ciertos jefes solo pueden ser vencidos en conjunción con otros amigos, debido a sus altos niveles.

ASPECTOS TÉCNICOS

Gráficamente el juego es un guiño a los títulos de rol de las 16 bits, con unos sprites de poco tamaño, pero con aceptables animaciones y unos entornos que, sin ser excesivamente amplios, poseen una amplia gama de detalles. A su vez los desarrolladores han apostado por un gran repertorio de secuencias de video y otras realizadas con el propio motor del juego. A pesar de que la trama no sea un portento en la narrativa, se ha notado un esfuerzo de dotar de profundidad a nuestro avance, lo que siempre es de agradecer para evitar situaciones planas e insulsas. Por otra parte, en ciertos momentos hay una caída de frames importante, no solo cuando hay muchos enemigos en pantalla, sino también cuando varios de gran tamaño se acaban uniendo. Quizás, por esta razón, se ha optado por escenarios más pequeños por la alta carga gráfica de los niveles.

Como bien se nos ha acostumbrado últimamente el juego nos llega con los textos traducidos al castellano, lo que también ayuda la claridad en el sistema de menús, realmente sencillo y claro, que será capaz de atraer hasta los jugadores menos dados con el género. También, en ciertas ocasiones, se incluyen en las secuencias importantes distintas voces en inglés que van a dar un toque exclusivo a un juego repleto de líneas de texto.
Un punto que conviene destacar es la exquisita jugabilidad presente. No estamos ante un videojuego de rol de grandes proporciones, pero el sistema de objetos, el propio de equipo, la posibilidad de hacer crecer de forma independiente a las sombras, el buen hacer de los personajes secundarios y la alta personalización de nuestros compañeros, son factores a tener muy en cuenta que han sido introducidos de manera muy sabia en la jugabilidad del título. Además, la durabilidad supera con creces las 30 horas, con bastantes misiones principales y secundarias que superar y secretos que descubrir. Una duración que, viendo los tiempos actuales, es idónea.
BLUE DRAGON: AWAKENED SHADOW-ÍNDICE
PÁGINA 1 – Análisis.
PÁGINA 2 – Conclusiones.

Comentarios